PRESENTACION
Hemos escrito sobre nuestros
antepasados para hurgar de dónde venimos y quiénes somos, sabemos de Francisco
de Paula Alcántara, tatarabuelo (Prócer de la Independencia), de Francisco
Linares Alcántara, bisabuelo (Presidente de la República), de José Ángel Rodríguez,
abuelo (Maestro de Primeras Letras e Industrial), y no podía faltar Ángel
Augusto Rodríguez Pacheco, nuestro Padre (Comerciante y servidor público). Para
poder escribir esta breve semblanza hicimos uso de los documentos básicos, de
los recuerdos, de las anécdotas y del aporte de familiares.
Podemos definir a nuestro querido
Padre como un hombre de formación familiar cuyas semillas del respeto, el amor
y el sentido del gentilicio turmereño fue sembrado por su Padre José Ángel Rodríguez, quien fue
un hombre culto de dilatada trayectoria en la enseñanza, y por la otra parte,
de una dama, Misia Herminia Pacheco, mujer de altos valores familiares y
espirituales. Nuestro Padre Ángel Augusto surge de una familia decente y respetable. Este gran
hombre se crio y educó en su querido
Turmero de principios de siglo XX. Asumió sus responsabilidades a temprana edad
para cuidar de su madre y trabajar para vivir. Fue un emprendedor de la época,
a los veintiún años participaba en una línea de taxis, luego se dedicó al
transporte agrícola, de los fletes de caña de azúcar y de otros viajes al interior del país, y
también fue un gran servidor público. Sus mejores amigos fueron sus compañeros
de trabajo, a casi cincuenta años de su partida, lo recuerdan mucho. Entre sus
descendientes era el más apreciado de sus hermanos, lo consideraban el ANGEL DE LA GUARDA DE TODA LA FAMILIA,
fue un excelente hijo, hermano, tío, cuñado, esposo y Padre, ni hablar. Con su
Edita, su esposa, fue algo especial, se amaron hasta el final. Se preocupó por
su terruño al que sirvió con pasión.
Para efectos de la recopilación
dividimos el trabajo en cuatro partes de manera cronológica, partiendo desde su
nacimiento hasta el final de sus días. Para ello, nos trasladamos en el
tiempo-espacio, además que plasmamos todas nuestras vivencias, los que nos
convirtió en actores participativos de este producto investigativo, así
mismo, aprovechamos algunos documentos
escritos e imágenes de la época, aparte del aporte valioso de familiares y
amigos.
Fueron cincuenta y ocho (58) años
de vida, que perduran en el tiempo y en
los recuerdos de nuestras vidas por lo que el
objetivo de este modesta recopilación busca que los descendientes familiares sepan quien
fue este ejemplar hombre que nos dejó como herencia ser buenos ciudadanos y
hombres de bien.
Néstor Germán Rodríguez
IMAGINARIO DIRIGIDO A MIS HIJOS
Muchachos he estado pendiente de
ustedes todo este tiempo, se tomaron la molestia de escribir tantas cosas de mí
que quizás no la merezca, pero realmente me llenan de satisfacción porque estoy
convencido que no are en el mar, algunos de ustedes se han ido y me acompañan
por aquí en la vida celestial, otros se encuentran en el plano terrenal
desarrollando un trabajo de ciudadanía
muy importante, lo cierto es que para mí los continuo queriendo igual
y ahora mas que nunca con toda esa cantidad de nietos que me han dado.
Me siento emocionado porque ahora perdurare con este escrito, voy a seguir
aconsejándoles como siempre, procuren ser amorosos, justos y responsables en
sus actos. No descuiden ningún detalle de la vida, hagan todo lo posible por
darles la mejor educación a sus hijos, prediquen con el ejemplo y mantenga
siempre una conducta intachable frente a la vida.
Aprendan todos los días, no crean que
se la saben todas, sepan oír, no tomen decisiones a la ligera, piénsenla bien y
compártanla para que no se equivoquen, claro no son infalibles, si caes, te
vuelves a parar, pero no para cometer el mismo error. Ustedes son exitosos en la
vida, lo han demostrado, sigan por el camino del bien, Dios siempre los
premiara, sean tenaces, irreverentes, trasmitan valores a los hijos, nunca
desmayen, perseveren en la vida y se les compensara. A la adversidad hay que
doblegarla con trabajo, tesón y dedicación, cuenten conmigo desde aquí en el
cielo, constantemente elevo mis
oraciones para que logren su bienestar moral, espiritual y material, invoco a
la Virgen del Perpetuo Socorro y a nuestra amada Virgen de Candelaria para que
siempre los ilumine y guie. Son muchas las razones para ser optimistas, la mas
importante es la familia, los hijos, los nietos, nos debemos a ellos, tienen
que verlos triunfar porque su empeño es grande y el camino que recorren
necesitan ser guiados por su sabiduría y sapiencia de buen hijo, tengan
la seguridad de que quien cosecha en la tierra de los lairenes recoge
excelentes frutos y ustedes han labrado el campo del amor y la ternura
constante a sus seres queridos y el
premio lo obtendrán al multiplicar el bien de toda una generación familiar.
Hoy me encuentro feliz de saber que nos
multiplicamos en la vida, que la semilla germino y recogemos los buenos frutos
del amor, la convivencia familiar y la bondad de las personas. Los quiero
eternamente, se despide su padre Ángel Augusto y dejo constancia mediante mi
rubrica como testimonio del amor, cariño y respeto que les tengo, además de
significar un compromiso por siempre.
ESTE ESCRITO FUE ELABORADO POR EFREN RODRIGUEZ
PARTE I SUS RAICES
1.1.SU ASCENDENCIA:
Sus Padres fueron JOSE ANGEL RODRIGUEZ y HERMINIA PACHECO, un maestro de Primeras Letras y una joven íntegra del pueblo. Sus abuelos paternos fueron Francisco de Paula Linares Alcántara y Amalia Rodríguez, un militar guerrero y hábil político que fue Presidente de Venezuela, y una inmigrante de Islas Canarias. Sus abuelos maternos fueron Brigido Pérez Flores y Elvira Pacheco. Un respetado comerciante y una mujer de familia reconocida.
1.2.NACIO EN TURMERO
Ángel Augusto Rodríguez Pacheco
nació en Turmero, estado Aragua, el día Domingo once (11) de diciembre de mil
novecientos diez (1910) a las tres y cuarenta y cinco de la mañana (3:45 am.),
en la casa ubicada en la Calle El Silencio, luego Calle Urdaneta N° 21,de la misma ciudad,
ubicada al frente del actual Banco Banesco.
1.3.LA CASA DE LA ABUELA:
Esta casa fue adquirida por José
Ángel Rodríguez el 18 de enero de 1904. Luego, cuando el gobierno expropió la
casa a mi abuela Herminia, esto por causa de utilidad pública, nuestro Padre se
esmeró en construir la casa nueva con todas las comodidades y detalles con tal
que mi abuela estuviese agradada. Por ello invirtió de su peculio en esa casa y fabricó tantas
habitaciones pensando en los familiares que nos visitaban. Yo diría que mi Papá
amaba a mi abuela, vivió con Ella toda la vida, los demás, y es obvio, se fueron
a otros lugares en la medida que formaron su hogar, mi Papá se quedó con
la abuela. Fue uno de los últimos en casarse, de allí la diferencia de años que
tenemos con nuestros primos de mayor edad. Mi Padre, dicen, consintió a sus
sobrinas y sobrinos. Pedro (de Amalia), José Ángel y Elpidia (de Amos), se
criaron prácticamente en la casa. Pedro llegó hasta manejar los camiones de su
propiedad, Elpidia aprendió a cocinar y coser en casa. Al morir la Abuela
Herminia en 1954, la sucesión Rodríguez Pacheco venden la casa en 1957
1.4.LA MEJOR ESCUELA: SU PADRE
Para 1916 cuando Ángel Augusto
inicia sus estudios de Primeras Letras en la
Escuela Municipal de Varones de Turmero que fue dirigida por el Br.
Manuel Felipe Rui, donde se impartían clases de Aritmética, Lectura, Escritura,
Geografía, Historia de Venezuela. Cabe resaltar
que su Padre José Ángel Rodríguez impartió para finales de 1800 clases en la esquina
Sureste de la calle Real frente a la Plaza Mariño donde las escuelas privadas
eran permitidas por el Ministerio, el abuelo se encargaba de los varones y
Carmen Rodríguez de Frydensberg de las hembras, quien además daba clases de
francés. Mi Padre estudio hasta tercero y/o cuarto grado de instrucción
primaria. Por ello decimos que la mejor escuela fue su Padre. Papá nos enseñaba a multiplicar y dividir con
facilidad.
1.5.UN PADRE PARA LOS SOBRINOS
Su cercanía a la Abuela le daba la
autoridad moral para tomar algunas acciones, se recuerda que actuó protegiendo
a algunos familiares y en otros les llamó la atención. Tuvo que intervenir para
proteger la propiedad de una casa haciendo una compraventa, y luego la
devolvió, o reprender a alguno que pensaba exigir algo en detrimento de su
propio familiar.
Loa hermanos, sobrinos y demás
familiares le iban a consultar o solicitar su ayuda.
1.6. LOS ZAPATOS DE SU SOBRINA
Estando las sobrinas de
vacaciones en Turmero, se reunían todas ellas, Josefina, Hilda, Carmen Emilia,
Teófila y otras más que venían a las fiestas patronales de Turmero. Estas
señoritas tenían un anfitrión, la tremenda María Elpidia, que era una de las
consentidas de la abuela Herminia. Sucedió, que fueron al río que pasa por la
Aduana y estando saltando entre piedra y piedra, a Carmen Emilia, se le cayó un
zapato y el rio se lo llevo. De regreso a casa Ángel Augusto se encontró con su
sobrina muy triste, esa tardecita le pide el otro zapato y a la mañana
siguiente su Tío “Bubuto”, como le decían todas, parte temprano a Maracay y regresa
con un par de zapatos nuevos. Las demás sobrinas pedían ir de nuevo al río para
quedar sin zapatos y el Tío querido les comprase unos nuevos.
1.7.EL SOBRINO FAVORITO:
Pedro Reyes Rodríguez
Algunos sobrinos vivieron en la
casa de la Abuela, José Ángel Rodríguez Carmona, Pedro Reyes Rodríguez, María
Elpidia Rodríguez Carmona y Alfredito Pacheco Lugo, entre otros. Pero el
preferido fue el sosegado Pedro Reyes Rodríguez, hijo de Amalia Teresa
Rodríguez Pacheco. Por ser uno de los nietos mayores de Herminia Pacheco, tuvo
la oportunidad de conocer a su bisabuelo materno Brigido Pérez Flores. Ángel
Augusto lo tenía como su hijo, le enseñaba a manejar y la mecánica en los
vehículos de transporte.
Cuando iban de viaje a Caracas,
Pedro que era un muchacho, manejaba el camión desde Turmero a La Victoria, esto
lo hacía porque el Jefe Civil era el Tío Francisco que de cierta manera era una
protección. Pedro fue muy solidario con Ángel Augusto cuando ejerció cargos
públicos. Lo consideraba como su Padre.
1.8.SOCIO Y AMIGO FIEL
Gil Augusto Plasencia, conocido como
“El Catire Plasencia”, fue uno de los grandes amigos de Ángel Augusto
Rodríguez. Hicieron negocios juntos y/o compartían los mismos. Con José María
Marín y otros turmereños formaron una línea de taxis ubicada al lado frontal de
la Iglesia. Luego emprendió el transporte de productos del campo hacia las
zonas de consumo.
Compraban
en las zonas agrícolas, principalmente
Guayabita, también compraban la
producción familiar del pueblo. Esta empresa fue exitosa. Viajaban dos o tres
veces a la semana a Caracas, al mercado de Quinta Crespo, Coche y de San
Martín
.
1.9.SOLTERON CODICIADO
Ángel Augusto fue un solterón muy
codiciado se casó a los 33 años de edad, en ese periodo tuvo muchas aventuras,
unas conocidas y otras no. El primo Francisco
“Pancho” Rodríguez nos informa que una de ellas fue la señorita
Clementina Trujillo Córdova, una persona de respeto y aprecio dentro de la
sociedad de la época. Era hermana de su gran amigo de la juventud, Carlos
Trujillo Córdoba. El enfermero por excelencia del pueblo que iba de un lado a
otro con su maletín para administrar las inyecciones a niños y adultos.
1.10. LOS PRIMEROS HIJOS
Armando E Perez
Ángel Augusto Rodríguez tuvo dos hijos naturales, cuando
apenas contaba con 23 años nació ARMANDO
ENRIQUE PEREZ, hijo de Martina Pérez,
quien murió siendo Armando un niño, por ello estuvo un tiempo en la casa de la
abuela Herminia; luego fue criado por la Señora Mariana Esqueda, que tenía
parentesco con los Rodríguez Esqueda, descendientes de Amalia Rodríguez, abuela
de Ángel Augusto. El otro hijo natural se llama Francisco Antonio Boyer Borges,
del cual no tenemos mayores datos, según informaciones ha vivido en la
población vecina de Palo Negro. Un tío de este le comentó al primo Francisco “Pancho”
Rodríguez, que Ángel Augusto veló por su manutención cuando era un niño
1.11. TITULO
DE CONDUCTOR
Nuestro padre contaba con un
Titulo de Conductor (el cual pudimos tener en las manos) que le permitía
manejar todo tipo de vehículos, tanto de tercera como de quinta, autos y
camiones. Junto con José María Marín
perteneció a la línea de taxi que estaba al lado de la Iglesia de Turmero.
Dentro de sus amigos choferes, recordamos a Augusto “El Catire” Plasencia,
Evelio Pernalete y Ramón Barrios “El Capitan”.
1.12. PELIGRO EN LAS CARRETERAS
Contaba nuestro Padre que en una
ocasión tuvo un accidente en la carretera vieja de Valencia a Puerto Cabello,
aquellas subidas eran muy inclinadas y
debido a la carga pesada, al pararse por alguna razón, el camión cedió
al freno de mano y se vino de retroceso sin nadie adentro, contaba Papá que
tratando de montarse y evitar un desastre peor, casi que resbala y es aplastado
por las ruedas. Gracias a Dios no pasó nada lamentable.
1.13. MIEMBRO DE LA COFRADIA DEL SANTO CRISTO
DE TURMERO
Nuestro Padre fue Cofrade de la
Sociedad de Jesús Crucificado donde compartió con sus amigos dicha devoción. El
14 de abril de 1927, a sus 17 años ingresa como miembro de la Sociedad, junto a
Ernesto
Silva, Francisco Magallanes y
Pedro Arancibia, entre otros. Esta Sociedad fue Presidida por ilustres
turmereños, uno de ellos Miguel Álvarez. Si mal, no recordamos, fue presentado
por Rafael Contreras.
1.14. SU DEVOCION POR NUESTRA SEÑORA DEL PERPETUO SOCORRO
PARTE II JEFE DE FAMILIA
2.1. CONOCE A NUESTRA MAMA
Edita Martínez
Ángel Augusto llegaba a comprar
las verduras, legumbres y frutas a las parcelas de la Colonia Agrícola de
Guayabita, en una de esas entradas vio a una jovencita dándole de comer a las
gallinas, le llamó de inmediato la atención, al conversar con Don Simón, pudo
conocer que se trataba de su hija Edita, Juana Edita era su nombre completo,
tenía 16 años. Solo la observo de lejos, ella apenas volteo la mirada. Ángel
Augusto siguió indagando, supo de boca de Maximino, el ayudante de la Parcela,
que ese mismo año había sido electa como la Reina de Guayabita. Ángel Augusto
se la ingenio, cada semana debía pasar a buscar la carga, hasta que llegó el
día de abordarla y surgió el romance esperado. Ángel Augusto había conseguido
la pareja que había deseado. Y es así, como el día Jueves, diecisiete de
febrero de mil novecientos cuarenta y cuatro (17-02-1944), Ángel Augusto
Rodríguez Pacheco, de treinta y cuatro
años (34) de edad, oficio de Conductor
de Productos Agrícolas en camión propio, siendo las seis (6) de la tarde,
contrajo matrimonio civil con Juana Edita Martínez Martínez de diecisiete años
(17) años de edad, natural de Artemisa, Provincia del Pinar del Rio, Republica
de Cuba, de oficio del Hogar, cuyos padres fueron Juana Martínez y de Simón
Martínez Pérez, este acto se celebró en la casa de habitación de los
mencionados padres, ubicada en la Parcela N° 31,de la Colonia Agrícola de
Guayabita de esta jurisdicción. La ceremonia civil fue presidida por el
ciudadano Gustavo Aníbal Pérez,
Presidente del Concejo Municipal del Distrito Mariño y de Francisco Ruí, secretario de la Corporación
edilicia.
Fueron testigos de esta ceremonia
civil los ciudadanos Augimiro Lander, Felicia González de Lander, Alfredo
Lozano Villegas, Yolanda Pacheco de Lozano, Manuel Salvador Borges y Narciza
Uzcanga de Borges.
El acto
eclesiástico se realizó el sábado diecinueve de febrero en la Capilla de la
Antigua Casona de Guzmán Blanco, en Guayabita del estado Aragua cuya ceremonia fue presidida por el
Párroco de la Parroquia Eclesiástica de Turmero Prebistero Trino de Jesús.
2.2. LOS HIJOS Y NIETOS
De su matrimonio con JUANA EDITA
MARTINEZ (MARTIN) PEREZ
tuvo cinco hijos: Ángel Gilberto que nació el 23 de enero de 1945, Néstor
Germán nació el 18 de abril de 1948, Efrén Augusto el 18 de junio de 1951,
Carlos Eduardo el 18 de marzo de 1954 y Mariela Herminia el 22 de julio de
1960.
Su descendencia posterior es bien
extensa: De Gilberto: Ilse María, Ángel Augusto, Claudia, Gilberto; De
Germán: Germán Augusto, Cristian Valerio, Gabriela Auxiliadora, Néstor
Rafael; De Efrén: Ángela Mariela, María Angélica, Vanesa Claret, Efrén Augusto,
Miguel Antonio; de Carlos: Any Dayana y Carla Carolina; de Mariela: Daniela, y
de Armando Pérez (hijo natural): Hialmar. Y esta descendencia sigue con los
biznietos y tataranietos
2.3. UN PADRE HEROE
Eran las 7 de la noche
aproximadamente, el niño Carlos que tenía un mes de nacido, dormía plácidamente
en su cuna heredada. En esa habitación dormíamos los cuatro hermanos, los dos
mayores, Gilberto y Germán en camas individuales, Efrén en una cama-cuna.
Estábamos todos en hacia la cocina. De repente, Gilberto llegó gritando que la
cuna de Carlos estaba prendida en llamas, todos corrieron, mi papá metió las
manos en la cuna y pudo sacar a Carlos que tenía quemaduras de segundo grado,
mi papá se quemó en los brazos. Se pudo evitar una desgracia porque se llegó a
tiempo. Mi Madre lloraba en medio del accidente. De inmediato el Doctor Rada
vino a curar al niño Carlos que presentaba lesiones en la cara, el pecho, los
brazos y manos, el abdomen y las piernas, las ampollas eran de contenido
líquido, del dolor de nuestro hermanito recién nacido no cesaba de llorar por
el dolor. El tratamiento duro semanas. La piel se le había abombado en varias
partes del cuerpecito. El niño volvió a nacer. Gracias a Dios.
2.4. LOS DESAYUNOS CRIOLLOS
Nuestro Padre construyó un
comedor especial en la nueva casa de la Calle Urdaneta No 21,de la ciudad de
Turmero, esto para compartir cómodamente
con sus hermanos, cuñados y demás familiares, en la mesa rectangular y
de sillas de mecatillo se sentaban los comensales, los desayunos eran
exquisitos, recordamos carne asada, fritangas o tere tere, cochino frito,
caraotas fritas, carne esmechada, quesos, aguacate y demás delicias con arepa
de budare. Recordamos un asador de kerosen tipo roster. El cafecito guayoyo y
con leche no faltaba y un jugo de frutas como naranja. Les puedo garantizar que
nadie fumaba. Ese desayuno permitía las conversaciones sobre temas de interés
general y particular.
2.5. LOS PASEOS DE FIN DE SEMANA
En aquella época ir a la laguna
de Taguayguay y comerse unos sándwich o un perro caliente fueron paseos
inolvidables. Llegar a La Encrucijada a comprar paella para llevar a casa era
lo máximo; así como llegar al Parque Codazzi y poder montarse en los columpios
y demás atractivos mecánicos, visitar la parte del pequeño zoológico donde
estaban los monos y las aves; así como atravesar la cueva del Acuario.
2.6. LOS AMIGOS LO SONSACABAN:
Alfredo Pacheco Lugo
El Catire Plasencia y Alfredo
Pacheco Lugo (Alfredito) eran sus grandes amigos. Una noche los vimos llegar a la casa bien “encarburados” dispuestos a
llevarse a su amigo. Ambos iban vestidos de trajes de lino blanco. Lamentable
para ellos se consiguieron con la esposa Juana Edita, y después de insistir se
retiraron con las tablas en la cabeza. Ángel Augusto era de poco beber licor.
2.7. EL CORTE DE CAÑA DE AZUCAR
A las 3:30 de la madrugada sonaba
el despertador, comenzaría la jornada diaria, a esa hora nuestra madre
preparaba el café negro que colocaría en un termo, en otro colocaba leche
caliente, igual las arepas rellenas para el desayuno y el agua en la pimpina.
Nuestro padre encendía el motor del camión por medio de la manilla de arranque
y antes de las 4 am se buscaban a los ayudantes. Se llegaba a los sembradíos de
caña de azúcar, se prendían las lámparas de querosén y comenzaba el corte a
machete. El día anterior se habían quemado las hojas. De forma rigurosa se
hacían lotes de unas 20 o más cañas cortadas en trozos de más de un metro, una
vez amarrados se cargaban al camión. Así se transportaban al Central Azucarero.
Se hacían dos o tres viajes al día. El flete lo pagaba el Central.
2.8 LOS DOMINGOS EN GUAYABITA:
 |
Los domingos Ángel Augusto
viajaba con regularidad con la familia a Guayabita, allí visitaría a los
suegros y a una niña que lo ilusionaba, su ahijada, la pequeña Doris. Allí los
muchachos corrían por todas partes y el almuerzo era lo máximo, el famoso
hervido de gallina de la abuela Juana, donde las presas y verduras estaban
separados del caldo. En época del maíz las cachapas eran una delicia. La abuela
las preparaba también como una especie de hallaca de maíz, era para chuparse
los dedos. Nuestra Madre era feliz en aquel ambiente de campo.
2.9. EN LA INTIMIDAD ERA DICHARACHERO Y ROCHELERO
En las tertulias nocturnas cuando
se reunía en la intimidad de la casa, era echador de broma, rochelero y
dicharachero. Sus ocurrencias causaban risas. Era lo contrario que en la calle,
muy hablador, gracioso y ocurrente. A
la concuñada Corina le decía “te pareces una avispa mata caballo”. Su esposa
Edita se reía hasta mas no poder. Al morir su cuñado Juan, fue la mano derecha
de Corina. Una vez más su principios y valores de solidaridad se hacían
presente.
2.10. SU CONFIDENTE:
Vicente Corrales Jiménez, La Muda Candelaria, fue su ayudante,
peón, asistente, compañero de muchas jornadas laborales, donde se incluían
viajes, horas de taller, días de faena en la madrugada y en la noche. Vicente fue
un hombre corpulento, sencillo, colaborador y trabajador incansable.
Compartieron los peligros y las satisfacciones. Vicente se jactaba en decir que
era el confidente de Ángel Augusto, que le conocía todos sus secretos. Eso lo
vociferaba en sus círculos de amistades en la plaza, en los bares y en la
calle.
2.11. ORGANIZABA FIESTAS POPULARES
Junto al Catire Plasencia,
Roseliano Ramírez y Eduardo Utrera, entre otros, organizaban los carnavales y
otras fiestas populares. Preparaban desde los fuegos artificiales, desfile de
carrozas (en principio en carretas de mula), elecciones de la Reina, bailes
populares, circos y parques mecánicos, juegos, bazares, entre otros.
2.12. NO FUE POLITICO ACTIVO, PERO TUVO DESTACADA PARTICIPACION
En 1935 es elegido en Asamblea
Popular miembro principal de la Junta de Sufragio para supervisar las elecciones de los funcionarios de
representación en el Distrito Mariño. Siempre fue visto como una persona
independiente. En esa Junta Electoral estaban también José María Marín, Augusto
Plasencia (El Catire) y Francisco Rodríguez.
2.13. PRESIDENTE MUNICIPAL
Ángel Augusto fue candidto a Concejal por el Partido Democrático Venezolano (PDV) en 1945, las elecciones no se realizarón.
Le dan el golpe
de Estado a Medina Angarita y asume una Junta Cívico Militar con Rómulo
Betancourt como Presidente, la gente del pueblo va a la casa de Herminia
Pacheco a buscar a Ángel Augusto, para ofrecerle por consenso que asumiera la
Presidencia del Concejo Municipal. Acepta en virtud de la circunstancia.fue presidente entre 1945 y 1948. La
transcripción de la nota de prensa de la época señala lo siguiente:
“Conocido en todos los sectores
del pueblo turmereño, fue electo recientemente Presidente del Concejo Municipal
del Distrito Mariño. Por su condición de hombre laborioso y preocupado por los
problemas colectivos; así como por las actividades deportivas, nos
congratulamos con el nuevo Presidente de los ediles de Mariño. Y que el Concejo
Municipal solicite de la Federación de Deportes de Aragua -sí esta entidad es
tal- colaboración para darle realce al
campeonato local, arreglo del estadio de Matadero, que ha sido espacio de
tantas gloriosas jornadas de béisbol”.
2.14. MUERE LA MATRONA
 |
Cuando muere su Padre era apenas
un niño de 10 años y el 8 de abril de 1954 fallece en Turmero su Madre Misia
Herminia Pacheco de Rodríguez. A los 44 años de edad nuestro Padre Ángel
Augusto, a pesar de ser uno de los hijos menores, era el deudo principal,
estuvo al lado de su madre todo el tiempo hasta su deceso, se hizo cargo de
todo y estuvo detrás del féretro todo el tiempo hasta su enterramiento.
Familiares y amigos les acompañaron desde la casa a la Iglesia y de allí al
cementerio de Turmero.
PARTE III UNA NUEVA ETAPA
3.1. A LA CALLE MARIÑO
Después de vivir en la casa de la
calle Urdaneta nos mudamos a la calle Mariño N°44, pegadito de la Iglesia Nra.
Sra. de Candelaria, esa casa era muy sencilla, pero confortable, su techo era de
tejas rojas a dos aguas y de caña amarga, la propia casa pueblerina, había una
puerta principal de madera y se caminaba por lo
que llamaban un zaguán. Uno se encontraba una segunda puerta, que había
que tocar para entrar, abrían una aldaba grande, luego estaba la sala donde
había un juego de muebles de tela grandote y uno de madera en forma de paleta. Al fondo estaba un
televisor a blanco y negro, donde apenas
se sintonizaba una o dos canales, todo dependía de la altura de la antena. Pegadito a la sala había un cuarto
muy grande que daba a la calle donde dormíamos todos los varones. Nos
recogíamos temprano, porque nos decían
que tarde de la noche solía aparecer la Sayona
y pasaba el carretón arrastrando unos peroles, haciendo una bulla
estruendosa, válgame Dios que lo viéramos porque nos quedaríamos sin vista. Al pasar el tiempo supimos en qué consistía esa leyenda. Lo cierto es que
la carreta la sentíamos, pero nunca vimos
a la Sayona. Entrando a la casa había una puerta que comunicaba con los tres cuartos contiguos. En el primero dormían
nuestros padres, luego, ellos se mudaron al más grande y nos mandaron a todos
los hermanos para ese lugar. Lo agradecimos,
porque así no estaríamos
preocupados por el paso del Carretón y la intempestiva llegada de la
Sayona. Por cierto, resulta muy curioso que antes las esposas o mujeres de la
casa no se sentaban en la mesa a comer,
se limitaban a servirnos de manera puntual, lo hacíamos en familia, incluso se
bendecían los alimentos, mi papá Ángel
Augusto se sentaba en uno de los extremos de la mesa y a cada lado los cuatro
hermanos. Era todo un ritual, nadie llegaba tarde a la hora de la comida,
cuando lo hacíamos nos daban un escalofriante
regaño con la vista y eso era suficiente para saber que no lo habías
hecho bien.
El espacio del comedor era
relativamente amplio, la cocina era de kerosene, con cuatro hornillas y un
horno. La nevera si era eléctrica, pero no enfriaba mucho, a un lado estaba el
baño y al final un lugar donde se guardaban las cachivaches, un tanque de agua
elevado. El techo de esta última parte de la casa era de asbesto y por ultimo
estaba el espacio del corral o fondo de la casa
3.2. SUS COMIDAS PREFERIDAS
Además de las tradicionales
hallacas navideñas que era su plato preferido, le gustaba la carne con papas y
arroz, también el pabellón criollo, sobre todo las tajadas de plátano maduro.
Nuestro padre comía a gusto las comidas de su esposa Edita quien elaboraba un
buen hervido de gallina o de res. Nuestro Padre tomaba como merienda, cuando
venía de la calle, una hallaquita de esas curvilíneas que comía con pedazo de
queso blanco llanero, le encantaba. La Tía Corina Guzmán, esposa de nuestro tío
Juan, hermano de Mama, nos comenta que le gustaba el papelón con queso blanco.
De dulces, ni hablar, su preferido fue el de higos y el de lechosa, el quesillo
era de ensueño. Las tortas de harina y la de pan las comía con café con leche. Era dulcero.
3.3. EL HOMBRE EN LA LUNA
Cuando el Apolo 11 llegó a la
luna el 20 de julio de 20 de julio de 1968, mi Papá salió de su dormitorio
cubierto con una sábana blanca, él era friolento producto del principio de
paludismo que padeció de cuando era un niño, igual le sucedía cuando se bañaba.
Nosotros sus hijos estábamos en la sala viendo este evento que mantuvo a
millones de personas frente al televisor. Cuando Neil Armstrong piso la luna y
veíamos que flotaba, quedamos enmudecidos. Nuestros hermanos Carlos y Mariela,
junto a Efrén, Germán y Gilberto, habían colocado colchones para esperar el tan
ansiado acontecimiento.
3.4. HABLABA CON LA MIRADA
Nuestro Padre era un hombre que
solo hablaba lo necesario a los hijos, al extremo que nosotros entendíamos lo
que quería cuando y como nos miraba. Que recuerdemos, nunca nos levantó la voz
ni nos alzó la mano ni nada parecido. Conversaba en silencio y apartado con
nosotros. Siempre aconsejando y orientando los pasos a seguir. El no intervenía
en cuestiones de rutina, lo más seguro que acordaba con nuestra madre, pero
aparte, en sus privacidades.
3.5. LOS JUEGOS DE ENVITE Y AZAR
En las fiestas patronales fue una
costumbre el remate de los juegos de envite y azar, esto consistía en otorgar a
personas privadas, una especie de concesión para instalar las mesas de juego en
bares y locales privados. Dentro de los juegos se destacaban: Ruleta, bagatela,
batea, carrusel, blanco y negro, etc. Mi Padre siempre tenía uno o dos socios
para invertir, él no jugaba, solo administraba. Se encargaba de vigilar el
funcionamiento y de las relaciones públicas. En Turmero había como en todas
partes jugadores compulsivos y viciosos. Las Fiestas de Turmero, siempre fueron
famosas y venían personas de otros lugares. Aparte de estos juegos existían los
bazares y bingos que funcionaban en los alrededores de la Plaza Mariño. Pudimos
presenciar de primera mano aquellas apuestas, las fichas y las monedas se
colocaban en el paño o tapete mientras la bola blanca giraba. El croupier o
repartidor de juego usa un rastrillo para retirar las fichas.
3.6. BUEN DOMINOCERO:
Para los conocedores de la
materia, Ángel Augusto fue un buen jugador de domino. Recordamos haberlo visto
jugar en el Bar La Soledad del Sr. Pedro Gavidia, ubicado entre la calle Ribas
y la calle Mariño. Allí en mesas de madera se jugaban las partidas del domino
clásico y otras modalidades como cruz. Las 28 piezas se barajaban y las
anotaciones se hacían con tiza sobre la misma mesa. Ese bar era muy famoso por
las arepitas redondas y rellenas.
3.7. PLAN DE EMERGENCIA:
Había caído el régimen
dictatorial, una Junta de Gobierno encabezada por un militar tenía la riendas
de la nación, para enfrentar el problema de desempleo de inició un Plan de
Emergencia, una especie de subsidio al desempleo. El trabajo consistía en
reparar calles, limpiar malezas, recoger escombros y basura, demarcación vial,
entre otros trabajos. Se puso en práctica un plan de, emergencia que “no fue
otra cosa que un primer subsidio al desempleo, establecido por el Gobierno para
atenuar las manifestaciones de violencia social originada por la acumulación en
Caracas y sus alrededores de una población de miles de venezolanos
desempleados". El desempleo se acentuó a partir de la caída de Pérez
Jiménez, debido a la casi paralización que se produjo en la industria de la
construcción; y la falla del plan estuvo en no haber empleado a los
trabajadores en obras de importancia, sino en tareas domésticas; esto como
forma de justificar el salario de los trabajadores adscritos al plan. Mi Padre
dirigía un numeroso grupo de estos trabajadores que fueron reclutados de la
población desocupada. En medio de las improvisaciones y el descontrol, el plan
se llevó a cabo.
3.8. UN INFARTO CASI LE SORPRENDE
Eran las primeras horas de la
tarde cuando el camión de carga manejado
por Ángel Augusto se estaciona frente a la casa ubicada en la Calle Mariño No.
44 de Turmero, a duras penas ingresó a la casa y de inmediato buscó la cama,
venía infartado, tenía 47 años de edad, nuestra madre lo atiende y antes de
percatarse le da los primeros auxilios. Nosotros permanecíamos ignorantes sin
saber que pasaba. Vino a verlo el Dr.Rada, médico del pueblo y ese mismo día,
procedente de Maracay llegaría el Dr. Alfonso Martínez Ramos, el único
cardiólogo existente en la zona. Reposo absoluto fue la orden. Esa misma noche
hubo de conseguirse una bombona de oxígeno, el electrocardiograma reflejaba un
infarto de cuidado intensivo. Se prohibieron las visitas, nadie entraría a la
habitación. Las primeras noches, más de un centenar de personas se aglomeraban
al frente de la casa para preguntar por el estado de salud. Esperaban por un
desenlace fatal por la gravedad de su estado. Dentro de los medicamentos no
podemos olvidar unas pastillas de PERSANTIN que eran como la salvación. La
recuperación duro unos sesenta días mínimos. Gracias a Dios, poco a poco fue mejorando.
3.9. EMPLEADO MUNICIPAL
Cuando quedó enfermo, sin poder
manejar y golpeado por la gravedad de la dolencia cardiaca, y siendo aún un
hombre menor de 50 años, conociendo los demás de su honestidad, responsabilidad
y liderazgo, fue designado a mediados de
los años sesenta como Jefe de los Servicios Públicos Municipales en el
Municipio Mariño.
3.10. APARECE UN HERMANO DESCONOCIDO
La segunda noche de la crítica
situación de nuestro Padre, aparece una persona de treinta años de edad que
solicita ver a Papá e insiste en ese propósito, se trataba de Armando Pérez, su
hijo, en las primeras de cambio nuestra madre Edita se resiste porque ella
desconocía de la existencia de este hermano paterno. Luego de las explicaciones
debidas, sobretodo que Armando había nacido mucho antes del matrimonio, cuando
tenía 24 años. Armando ingresa a la habitación y puede al menos verlo en medio
del oxígeno y las vías que tenía colocadas para el suministro de medicinas y
suero.
3.11. LA SOLIDARIDAD DE SU FAMILIA
En las épocas malas que atravesó
por su enfermedad Ángel Augusto, fueron muchas personas que le tendieron su
mano, el que más su sobrino Pedro Reyes Rodríguez quien nunca le negó una
medicina. Otro que fue leal fue su hermano Francisco, quien facilitó el ingreso
de Gilberto a trabajar en el Matadero de Turmero y compartía con nosotros la
carne que recibía como compensación.
Un día nuestro padre nos comentó
lo siguiente: “Hijo podrás hacer noventa y nueve acciones buenas, pero bastará
que no puedas complacer en la última para que te juzguen mal. Esa es la verdad. Se refería a un amigo a
quien le había resuelto muchos problemas y ayudado una y otra vez, y ahora
despotricaba de él por no haberle podido ayudar en un favor económico”, esa
afirmación se nos grabó por siempre
3.13. MUERE EN LA CALLE:
3.13. MUERE EN LA CALLE:
El 11 de noviembre de 1968, en
horas del mediodía, al salir a caminar por las calles del pueblo, como solía
hacerlo, le sobreviene ya el infarto definitivo. Nuestro Padre vivía preocupado
por su estado de salud, el malestar lo sentía. La enfermedad silenciosa tenía sus síntomas y lo presumía. Cuentas los
que lo vieron caer al piso que fue algo fulminante, nos imaginamos que había encendido
su cigarrillo Camel (fumaba muy poco) después de tomarse algún cafecito negro.
Una de las personas que lo auxilió fue su amigo Clemente Carapaica, alías
“Cachapo”. Pudieron cargarlo y trasladarlo ya muerto, a la casa. Había
fallecido en las calles de su pueblo al que tanto sirvió y donde vivió toda su
vida.
PARTE IV LA HERENCIA
4.1. TE FUISTE TEMPRANO
Es difícil entender porque
nuestro padre Ángel Augusto se fue tan
temprano de este mundo, del plano terrenal, estamos seguro que se encuentras
bien, sin problemas y transcurriendo la vida eterna en el mundo celestial a
donde todos llegaremos algún día para encontrarnos. Tu siempre predicabas con
el ejemplo, nunca escuchamos un grito, reclamo o reproche a mi madre, al
contrario en él veíamos la responsabilidad, el cumplimiento con el hogar y la
atención a los hijos. Siempre tenemos muy presente cuando salíamos a pasear en
el Camión Chevrolet que tenías, el mismo donde cargabas Caña de Azúcar de las
parcelas de Guayabita para el Central El Palmar, o frutas para la capital del
país. Solíamos preguntarle la razón de que por qué a los lados de la
carretera y del Lago de Valencia se parecían o asemejaba a un copo de nieve y
respondía que se trataba de cultivos de algodón que había para aquel entonces
en la zona. Nuestra madre, Edita (QEPD),
nos contó una vez que cuando fuiste Presidente del Concejo Municipal y ganabas
100 bolívares, que todo lo repartías
entre la gente, es decir fuiste muy bondadoso y por esa razón el pueblo
de Turmero te tenía cariño. Esa fue otra de tus permanentes enseñanzas,
servirles a los demás, sin importar recibir una recompensa material. Muchas
veces unas palabras de aliento resultan mejor que un pago material. Tenemos la
seguridad, porque tú ves todo desde allá arriba, que te sientes orgulloso de
tus hijos y de la cantidad de nietos y tataranietos que tienes. Solamente te
pedimos algo, nunca los hijos, aunque se casen, dejan de pedir a sus padres,
los padres siempre serán padres por encima de cualquier circunstancia o
problema. Te queremos pedir que sigas
iluminándonos desde la vida eterna donde te encuentras, abriéndonos el camino
de la sabiduría, el amor y el fortalecimiento moral. Fíjate, que no
pedimos nada material, sino fuerza para
seguir adelante y dar lo mejor de cada uno de nosotros para lograr el país que
siempre soñaste y que tenemos la responsabilidad de continuar los ideales que
inculcaste en nosotros. Fuiste y seguirás siendo ejemplo para todos nosotros,
me refiero a tus hijos, nietos y tataranietos. Dejaste una gran herencia: el
respeto a los demás, la humildad, el amor por Turmero, la fuerza para el
trabajo, la formación de un hogar, la vida sana, la irreverencia ante la
injusticia. En fin, sembraste una semilla que se ha esparcido por toda la
patria, particularmente la patria chica, me refiero a Turmero donde se está
dando una inmensa cosecha de vida y vitalidad representada en todos nosotros.
4.2. UN HOMBRE DE PERSONALIDAD Y RESPETO
Ángel Augusto reflejaba en su
personalidad un hombre de gran respeto, lo que
constituyó un acto pedagógico de aprendizaje de la vida para todos sus
hijos. Sin dudas, su hogar se
desenvolvió en alguna ocasión con algunas carencias, pero a todos sus
hijos los levanto disciplinadamente
junto a nuestra madre, en un ambiente propicio socialmente, con buenas
costumbres, sanamente y llenos de alegría.
Quizás el momento más difícil de
nuestra infancia fue la partida de nuestro padre al cielo, al lugar infinito de
la vida, pero con todo y eso nos levantamos, gracias al esfuerzo de los mayores, que desde corta edad tuvieron que
asumir la responsabilidad material del hogar. Gracias a Dios que estaban
preparados y formados para enfrentar los retos de la vida. Con todo lo
ocurrido, seguimos adelante con un dolor que se convirtió en fortaleza.
También, es necesario reconocer que los
familiares más cercanos nos brindaron un apoyo espiritual, moral y
material inmensurable.
Siempre se veía a mi madre
Juana Edita que en los ratos libres tejía con unas agujas grandes
-poseía una destreza maravillosa en sus manos- unos coloridos escarpines de
colores azul, rosado, amarillo y
blanco también confeccionaba con sus prodigas manos: manoplas, guantes,
abrigos, mantos. Remendaba y zurcía la ropa de sus hijos de manera perfecta.
Probablemente exageramos, pero es la
verdad, nuestro padre tenía una letra
preciosa, bien delineada, igual que la de Gilberto y la de nuestra mamá.
4.3. LA INGENUIDAD DE NIÑO Y NUESTROS
PADRES
El día del nacimiento de Mariela Herminia, la Señora Natalia Fagundez, un personaje del
pueblo muy católico y creyente, nos sacó al solar para decirnos ¡¡¡Miren, miren la cigüeña
donde va, ella trajo la niña y partió, allá va volando!! Todos los que estábamos ahí le creímos…ja...ja, qué
inocencia tan grande, pero era la costumbre. La casa era un lugar tranquilo,
espiritual, mi mamá Juana Edita, a pesar de aparentar un carácter recio tenía
unos grandes sentimientos y de mucha sensibilidad social.
EL LEGADO DE NUESTRO PADRE
ANGEL AUGUSTO RODRIGUEZ
1. Trasmitió
los valores de la familia, la solidaridad e inculco el apego al hogar y los
hijos
2. Con
su perseverancia, disciplina y trabajo honesto nos legó el compromiso con la familia, la sociedad y el país. Supo
crear la convivencia familiar, asumiendo el papel de eje y centro familiar
3. Nos
ubicó en el camino del éxito y los logros personales con su interés para que
nos superáramos como ciudadanos y hombres y mujeres de bien
4. Predico
con el ejemplo y la practico el amor por el trabajo y el compromiso social,
además nos inculco el sentido de pertenencia por nuestro terruño de Turmero
5. Nos
forma en un ambiente de respeto, buenas costumbres y desarrollo de buenos
ciudadanos, hecho que extendió a quienes trabajaban a su alrededor al hacerlos
participe de todas las actividades que emprendía lo que demostraba su
desprendimiento y sentido de cooperación
6. Otra
de tus permanentes enseñanzas, fue
servirles a los demás, sin importar recibir una recompensa material
7. Dejaste
una gran herencia: el respeto a los demás, la humildad, el amor por Turmero, la
fuerza para el trabajo, la formación de un hogar, la vida sana, la irreverencia
ante la injusticia En fin, sembraste una semilla que se ha esparcido por toda
la patria, particularmente la patria chica, me refiero a Turmero donde se da
una inmensa cosecha de vida y vitalidad representada en todos nosotros
8. Desarrollo
el Don de la convocatoria, la gente creía en él por su sencillez, atención y
amabilidad. Era muy organizado, promovía muchas actividades de participación y
todavía en su lecho de enfermo, cientos de personas se aglomeraban a las
afueras de su casa para conocer su estado de salud. La multitud de personas que
acudieron a su sepelio fue una
demostración de liderazgo y afecto que le tenía el pueblo turmereño, esto lejos
de ser una pesadumbre nos llena de satisfacción y enseñanza porque enaltece el
valor de servir.
NECESARIO CONSIDERAR PARA CITAR EL TRABAJO.
Este trabajo se concluyó de
digitalizar en la ciudad de Turmero, en el estado Aragua, Venezuela, el 10 de
Julio del 2016, por el Lic. Néstor
Germán Rodríguez y las orientaciones pedagógicas del Prof. Efrén Rodríguez, en
el marco de la recopilación de las Memorias Históricas Digitalizadas de
Turmero.
Se agradece hacer referencia a su edición cuando cite algunas
de sus partes en los trabajos de investigación de acuerdo a las normas
establecidas para estos fines, manteniendo siempre el espíritu y contenido
expresado en su texto. EJEMPLO DE CITA. Rodríguez, Efrén (2013). Geografía de
Turmero. En: E. Rodríguez y NG. Rodríguez. Colección Memorias Históricas
Digitalizadas de Turmero, N° 5. Turmero, Estado Aragua
(Venezuela):
Edición Propia. Disponible en:
CONSULTAS REALIZADAS
Bolívar Pedro Modesto (2003)
Turmero ante la historia (1593-1933-2003).Maracay (Aragua): Talleres de la
Corporacion Pinfer C.A.
Guzmán de Martínez Corina.
Conversación Personal. Julio 2016
Rodríguez Francisco. Conversación
Personal, Junio 2016
Rodríguez German. Vivencias
Personales. Abril 1948- Junio 2016
Rodríguez Efrén. Vivencias
Personales. Junio 1951-Junio 2016
DERECHO DE AUTOR
Esta obra se reserva el derecho de autor prescrito en la página http://sapi.gob.ve/?page_id=116 Este derecho nace con el acto de creación y no por el registro de la obra. Es el derecho que posee el autor sobre sus creaciones sean estas obras literarias, musicales, teatrales, artísticas, científicas o audiovisuales. Se considera Autor a la persona natural (persona física) que crea alguna obra literaria, artística o científica. Se agradece a todos los lectores ceñirse a esta disposición
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